jueves, 3 de noviembre de 2011

Misil nuclear

En la mira está el plan de energía atómica de la república islámica

Israel probó ayer con todo éxito un misil nuclear que llega a Irán



Según el diario Haaretz, el 8 de noviembre es la fecha clave en la que el gobierno de Benjamín Netanyahu decidirá si lanzar un ataque preventivo contra arsenales iraníes. El país vive en un clima bélico desde el viernes.
 
Ocho de noviembre. Esa será la fecha en que el gobierno israelí podría decidir lanzar un ataque contra Irán que contemple la destrucción de su posible armamento nuclear, el cual se teme sea utilizado contra este país en el mediano plazo, debido a las continuas amenazas del presidente iraní Mahmud Ahmadineyad.
La información, publicada en el día de ayer por el diario Haaretz en base a fuentes anónimas de altos funcionarios de los ministerios de Defensa y Relaciones Exteriores, sale a la luz en medio del clima bélico que se vive en Israel a partir de una columna publicada el viernes pasado en el diario Yediot Aharonot. El autor, Nahum Barnea, informaba sobre presiones internas dentro del gobierno israelí para lanzar el ataque, así como a raíz del debate sobre este posible escenario que tuvo lugar el pasado lunes en la sede del Parlamento israelí, y de la prueba realizada en el día de ayer del lanzamiento de un misil desde la base aérea de Palmajim, el cual podría tratarse de la nueva versión tierra-tierra Jericó III, que tiene un alcance de entre 4800 y 11.500 km, y puede transportar ojivas nucleares de hasta 750 kg.
Incluso, según la citada columna de Yediot Aharonot, las dos principales figuras del gobierno israelí, el primer ministro Benjamín Netanyahu y el ministro de Defensa Ehud Barak, ya habrían tomado la decisión de lanzar el ataque. Mientras que en el día de ayer trascendió que lograron convencer a la tercera en importancia, el canciller Avigdor Lieberman, aunque aún tendrían la oposición de los restantes ministros del gabinete, por lo que la decisión no estaría tomada.
Es por esta razón que la fecha del 8 de noviembre se presume clave, ya que en ese día la Agencia Internacional de Energía Atómica publicará un informe sobre el desarrollo nuclear iraní, el cual podría llegar a terminar de inclinar la balanza para el caso de que el gobierno israelí presuma riesgos concretos.
Irán no niega su programa de enriquecimiento de uranio nuclear, el cual puede utilizarse para elaborar combustible nuclear y ojivas atómicas, pero afirma que el mismo tiene como objetivo la generación de energía eléctrica para fines pacíficos. Sin embargo, debido a su falta de cooperación con la ONU para la inspección de sus instalaciones, se presume que el mismo está orientado a fines bélicos. Durante la última cumbre nuclear celebrada en Turquía en enero pasado, la jefa de la diplomacia de la Unión Europea, Catherine Ashton, quien actuó como intermediaria entre Irán y los Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Rusia, China y Alemania, afirmó estar “decepcionada” con los avances de la cumbre, añadió: “Sigue siendo esencial que Irán demuestre que su programa nuclear es pacífico.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ojala todos entiendan que no hay otro camino que la paz.